viernes, 16 de julio de 2010

Cosas - Capitulo V - Virus

durante miles de años, los seres humanos
hemos podido disfrutar, del mejor regalo
que los dioses dieran jamás a ningún ser vivo

la brisa, el viento, el hermano sol y la hermana luna
campos y praderas donde ver crecer a nuestros hijos
amaneceres bañados con el perfume que estornudan las flores en primavera
puestas de sol decoradas por los sueños aun por concebir

y aunque parezca mentira… inteligencia

pero el hombre blanco despreció aquel tesoro
y a medida que la vida le sonreía,
el le contestaba dando patadas al destino

si alguien lee esta carta, no olvide que el fin de esta civilización
se debió al egoismo, codicia e incultura de la raza humana

los hombres ya no somos mamíferos
el ser humano no se convirtió en depredador
la raza humana somos simplemente un virus
matamos, crecemos, y nos multiplicamos

-Mago de oz. Atlantia

Tras escuchar la trilogia "Gaia" de Mago de oz la unico conclusion que he podido sacar es que los humanos somos un cancer.

¿Cuando empezó a ser así? Creo que en el momento en el que el primer mono desarrolló la conciencia, que nos diferencia del resto de animales, nuestra raza ya estaba abocada a la catástrofe. Es increible que siendo los seres mas inteligentes del planeta hagamos tonterias del mayor de los calibres.

El planeta tierra, una maquina precisa, un flujo de energia constante y equilibrado entre todos los organismos que la habitan... a excepcion de nosotros, que consumimos todo lo que encontramos a nuestro paso sin a penas necesitarlo.

Somos tan estúpidos de talar un bosque entero, destruyendo hectareas de preciosa flora y fauna, para sacar recursos naturales, y no solo no repoblar el paraje destruido, sino que lo llenamos de bloques de cemento llenos de habitaculos con la intencion de almacenar personas como si fueran hormigas.

Centrales nucleares que infectan a Gaia con la mas asquerosa ponzoña, empresas que construyen edificios que la hacen sangrar, cazadores que extinguen las especies que la habitan...

Y ahora, cuando vemos que toda la destrucción que causamos va a rebotarnos en la cara, cuando nos damos cuenta de que el daño que hemos causado a Gaia nos lo va a devolver en forma de tsunamis, tormentas, terremotos y lluvias de magma, cuando vemos que la madre tierra ha dicho "basta" y va a hecharnos de casa, somos tan arrogantes que nos proclamamos "Defensores de la naturaleza". La idea es buena, pero hay que reconocer que el mejor favor que podemos hacerle al planeta es desaparecer.

Somos la fuerza que rompe el equilibrio, entramos en el preciso reloj del equilibrio natural y destrozamos todos sus engranajes a base de golpes. Somos la influencia negativa, el unico ser vivo de este mundo que no aporta nada bueno al planeta, y todo lo que puede aportar es destruccion.

Es triste, y cierto, que el ser mas inteligente de un planeta se ha vuelto un cancer que se extiende y destruye su propio hogar, y no se da cuenta hasta que ve cerca su extinción. Tenemos el don de la inteligencia, pero este va de la mano con la maldicion de la estupidez.

En este sitio sobramos, y la madre Gaia nos lo dice cada dia con sus lagrimas acidas, su rugiente voz que hace temblar el suelo, y su ira, expresada en lluvias de fuego y ceniza tras la erupcion de un volcan.

Y aun asi, parece que no nos demos cuenta del todo...

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